Tercer Ojo

Ojo derecho

Se observa un lugar en construcción: el piso tiene huecos, las paredes están con cemento fresco y sin pintura; hay muchos objetos necesarios para el trabajo, como azulejos, tubos, una caja de herramientas, ladrillos, bolsas, baldes. Las ventanas del fondo no tiene vidrios, no hay puertas en ninguna de las aperturas. La pared del fondo se encuentra sin revocar; también hay restos material en el suelo. Arriba de una caja de baldosas, hay un juego de mate.

Ojo izquierdo

Mi casa entro en obras en el mes de Junio. Semana tras semana veo este lugar siendo destruido, reconstruido, sucio, desordenado, con poca luz. Es muy distinto a lo que solía ser, pero a la vez veo algunas partes que se mantienen, aunque se que cambiaran. La mayor parte de mi infancia la viví en esta casa y viéndola así me hace pensar si realmente puede seguir diciendo que es mi casa.

 Tercer ojo 

El paso del tiempo es inevitable. No podemos evitar el cambio. El proceso puede ser difícil, nos hace sentir mal e incomodos. Anhelamos el pasado para evitar el presente, el cual muchas veces es un caos que nos desorienta sobre donde estamos parados realmente. Pero al final, esos cambios son los que traerán mejoras a nuestras vidas. El espacio que viví tantos años será mucho mas amplio, permitirá que con mi familia estemos mas cómodos, teniendo un lugar para cada uno, al mismo tiempo que tendremos otros en común para seguir compartiendo. Mi necesidad de apreciar el cambio de este espacio, es mi necesidad de apreciar la necesidad de madurar y no sentir dolor por el inevitable paso del tiempo.